Hace un par de meses, y aprovechando el noveno aniversario de este blog, inicié la cuenta atrás hacia la presentación de mi tesis doctoral estructurando la investigación llevada a cabo hasta ahora como una Trilogía Narrativa.
El primer volumen de esta trilogía fue el libro Tempus fugit. El relato interactivo, escrito en 2001 como Trabajo Final de Carrera de la licenciatura en Comunicación Audiovisual de la Universitat Pompeu Fabra, que en 2004 se convirtió en libro.
El segundo volumen de esta trilogía fue el trabajo de investigación o tesina Narrativa multimedia, narrativa intransitiva. Investigación interdisciplinar sobre la narrativa digital como narrativa audiovisual no convencional, que elaboré para el Doctorado en Comunicación Social también de la Universitat Pompeu Fabra, y que presenté en septiembre de 2009.
Como en la entrada anterior, introduzco este "segundo volumen de la trilogía narrativa" y su contexto mediante las preguntas que creo que un interesado podría hacerme.
Escribiste Tempus fugit. El relato interactivo en 2001, pero no presentaste la tesina hasta 2009. ¿Tardaste ocho años en elaborar la tesina?
No fue exactamente así. Cuando terminé la licenciatura en Comunicación Audiovisual en 2001 estudié un posgrado en Teoría y Crítica del Arte Contemporáneo en la Escola Eina, un curso muy interesante coordinado por el comisario Manel Clot donde aprendí sobre los principales temas de análisis y agentes artísticos que dominaban en Barcelona en aquella época, tanto del contexto digital como de "arte contemporáneo" en general.
Me acababa de independizar cuando Tempus Fugit obtuvo los premios Joven de la Complutense y Espais de la Fundació Espais d'Art Contemporani (2002). Gracias al dinero del primer premio estuve seis meses sin la obligación de trabajar, durante los cuales viajé por primera vez a México, intenté escribir algo sobre pestañas de navegación, y finalmente no se me ocurrió nada. Cuando el dinero del premio se terminó, volví a trabajar, y no me matriculé en el doctorado hasta 2005.
¿Por qué no seguiste estudiado inmediatamente después de la licenciatura, si te gusta estudiar y escribir?
La prioridad era independizarme, y también me planteaba la posibilidad de vivir de la escritura ensayística. Durante la década pasada el dinero institucional parecía circular con cierta fluidez, y los proyectos de arte digital también recibían presupuesto, aunque me parece que la escritura siempre ha estado en un limbo extraño (no es "arte", no requiere "ayuda a la producción", pero sí "estar haciendo solo eso durante un tiempo", y tiende a ser investigación de base, no aplicada).
Traduzco profesionalmente desde el último curso de la licenciatura, de manera que la traducción ha resultado una profesión mucho más viable que el "escribir algo a ver si...", y también he conseguido vincularla a mis conocimientos académicos traduciendo las revistas Artnodes (UOC) e Hipertext(UPF).
Pero al final decidiste apuntarte al doctorado de Comunicación. ¿Por qué?
Me pareció que tendría más posibilidades profesionales si cursaba un doctorado. El régimen académico pre-Boloña era más flexible que el sistema actual, y pude cursar los dos años de doctorado y preparar la tesina durante los dos años siguientes mientras trabajaba. Si no hubiera podido trabajar, no habría podido seguir estudiando. Esta situación es muy inusual dentro de los doctorandos, por lo que es necesario explicarla para explicar por qué tardé y he tardado lo que he tardado, y señalar así cómo se articula mi relación con lo académico.
¿Mantuviste el intéres por la narrativa?
Totalmente. Aunque hubo un cambio muy importante que he repetido hasta la saciedad: me empecé a encontrar con muchas obras que no eran interactivas en el sentido de hacer clic y que pasaran cosas o que incluso pudieras modificarlas. Empecé a dar menos importancia a lo interactivo, y más a lo digital como lenguaje multimedia (texto, foto, vídeo y sonido combinados)
Además, empecé a interesarme por los orígenes de la creación narrativa digital. Para el trabajo final de la asignatura de doctorado "El mitjà interactiu" me basé en un blog planteado en fragmentos del comisario y crítico José Luis Brea (La crítica en la era del capitalismo cultural electrónico); el blog de Brea se basaba en pensamientos breves como los que podían articular autores como Walter Benjamin. Asimismo, me inspiré en la obra Diary of a stardel artista digital Eduardo Navas, que contextualizaba los diarios de Andy Warhol y a quien conocí cuando viajé a a la Bienal Interactiva de Mérida (México) a presentar Tempus Fugit (2005).
Considerando estos precedentes, tomé unas entradas que había escrito en mi blog sobre los orígenes de la narrativa digital y que aludían a aspectos específicos (vídeo, texto, espacio y tiempo), y las amplié a través de un segundo blog denominado Filiaciones narrativas.
Aproveché este proyecto doctoral para dar una conferencia en el Espacio Fundación Teléfonica de Buenos Aires que llevó por títuloNarrativas 2.0., donde vinculé esos cuatro orígenes de la narrativa digital a obras narrativas vinculadas a la web 2.0., para entonces de plena actualidad. Posteriormente, la revista Cybertronic de la Universidad Tres de Febrero me pidió un artículo con este mismo enfoque, "Genealogía de la narrativa creada por medios digitales" (2008), donde ahondé en obras y artistas analógicos que podían conectarse con la narrativa digital. Y amplié nuevamente este enfoque para la comunicación del IV Congreso de la CiberSociedad "De la narrativa analógica a la digital" (2009)
Por extraño que parezca al añadir ahora tantos enlaces, por aquel entonces aún no sabía que la idea de "filiaciones narrativas" iba a ser el germen de mi tesis doctoral.
Entonces, al terminar los cursos de doctorado, redactaste una tesina titulada Narrativa multimedia, narrativa intransitiva. Investigación interdisciplinar sobre la narrativa digital como narrativa audiovisual no convencional. Vayamos por partes, ¿por qué "narrativa multimedia, narrativa intransitiva"?
Estaba intentando afianzar un concepto que no fuera "relato interactivo" por los problemas que me planteaban todas aquellas obras digitales interesantes que no eran interactivas. A comienzos de 2005 había coordinado junto a Antoni Mercader el V Congreso de Arte y Multimedia: Metanarratives, donde elegimos a ponentes dedicados a las "metanarrativas" según el término que acuñó Mercader (nada que ver con las metanarrativas de Jean-François Lyotard, Mercader pensó unas narrativas "más allá de la narrativa", por así decirlo). Debido a esta colaboración, durante un tiempo me asociaron con el término "metanarrativas", que me parece interesante, pero no es mío.
Para cuando empecé a preparar la tesina, necesitaba un concepto propio. "Narrativa digital" habría sido la opción más lógica para encabezar el título, pero por algún motivo dudé y quedó como subtítulo, de manera que "narrativa multimedia, narrativa intransitiva" son conceptos más descriptivos de lo que desearía para un título. No obstante, hace muy poco di con esta entrevista al escritor Juan José Millás, donde amplía magníficamente lo que tenía en mente con lo de "narrativa intransitiva":
De acuerdo, un título muy largo y complicado para la tesina. ¿Qué tiene dentro?
Narrativa multimedia tiene muchísimo de Estado de la Cuestión muy general. Es decir, que paso muchas páginas no solo justificando la idoneidad de investigar narrativas, sino también de hacerlo en el contexto de investigación de arte y cultura digital en general. Mi obsesión, que dura hasta el presente, es que hay muy poca investigación sobre narrativa dentro del arte digital, al margen de la investigación sobre videojuegos o la investigación transmedia, ambas, a su manera respectiva, muy especializadas.
En cualquier caso, lo más importante de Narrativa multimedia es que define el objeto de estudio de la narrativa digital, y plantea un guión y unas preguntas de investigación que he aprovechado (con las modificaciones pertinentes) hasta la actualidad.
Entonces hay una definición útil de narrativa digital en Narrativa multimedia. ¡Aleluya! Oigamosla.
Dije "conjunto de obras narrativas multimedia, accesibles en línea, que como tales participan mayoritariamente de los rasgos constitutivos del medio informático" (pág. 63). Dedico las primeras páginas de mi tesis doctoral a pulir esta definición. Cuando presenté la tesina ya comenté esta definición de narrativa digital y su contexto en el blog, y añadí la presentación en imágenes de la tesina para acompañarla.
Asimismo, en Narrativa multimedia también aparece la primera definición operativa de "filiaciones narrativas" (pág. 66), que como he dicho ha acabado constituyendo el cogollo de la tesis.
¿Qué conclusiones sacaste al elaborar Narrativa multimedia?
Constaté que el objeto de estudio de la narrativa digital estaba indefinido a pesar de las múltiples aportaciones existentes a la investigación del arte y la cultura digital.
Percibí asimismo que, aunque existe mucha investigación audiovisual en términos de "estudios fílmicos" o incluso de "estudios sobre videoarte", parece haber varias escisiones. Por un lado, entre arte contemporáneo y arte digital (lo que he tratado a menudo en las entradas de este blog etiquetadas como arte digital vs arte contemporáneo), pero tambié otra muy importante entre arte y narración. Como si la narración fuera por definición algo mainstream, convencional, "no artístico" en términos de "mundo del arte".
Sin embargo, todo lo que había podido investigar hasta la tesina arrojaba múltiples ejemplos de narrativa no lineal, no aristotélica, pasados y presentes. Me veía en la necesidad de conectar esos ejemplos para ver qué me enseñaban sobre lo que quería denominar "narrativa digital".
¿Qué hiciste al terminar Narrativa multimedia?
Seguir trabajando. Estaba preparando la tesina cuando empecé a trabajar también como docente en línea para la Universitat Oberta de Catalunya, muy especialmente en el ámbito de la comunicación digital. Escribí Narrativa multimedia en dos meses, pero mis periodos de preparación y reflexión, combinados con el trabajo, son extremadamente largos.
Próximamente comentaré otras lecturas, actividades y reflexiones que me condujeron a la elaboración del tercer volumen de esta Trilogía Narrativa, mi tesis doctoral tal y como está escrita.
El primer volumen de esta trilogía fue el libro Tempus fugit. El relato interactivo, escrito en 2001 como Trabajo Final de Carrera de la licenciatura en Comunicación Audiovisual de la Universitat Pompeu Fabra, que en 2004 se convirtió en libro.
El segundo volumen de esta trilogía fue el trabajo de investigación o tesina Narrativa multimedia, narrativa intransitiva. Investigación interdisciplinar sobre la narrativa digital como narrativa audiovisual no convencional, que elaboré para el Doctorado en Comunicación Social también de la Universitat Pompeu Fabra, y que presenté en septiembre de 2009.
Como en la entrada anterior, introduzco este "segundo volumen de la trilogía narrativa" y su contexto mediante las preguntas que creo que un interesado podría hacerme.
Escribiste Tempus fugit. El relato interactivo en 2001, pero no presentaste la tesina hasta 2009. ¿Tardaste ocho años en elaborar la tesina?
No fue exactamente así. Cuando terminé la licenciatura en Comunicación Audiovisual en 2001 estudié un posgrado en Teoría y Crítica del Arte Contemporáneo en la Escola Eina, un curso muy interesante coordinado por el comisario Manel Clot donde aprendí sobre los principales temas de análisis y agentes artísticos que dominaban en Barcelona en aquella época, tanto del contexto digital como de "arte contemporáneo" en general.
Me acababa de independizar cuando Tempus Fugit obtuvo los premios Joven de la Complutense y Espais de la Fundació Espais d'Art Contemporani (2002). Gracias al dinero del primer premio estuve seis meses sin la obligación de trabajar, durante los cuales viajé por primera vez a México, intenté escribir algo sobre pestañas de navegación, y finalmente no se me ocurrió nada. Cuando el dinero del premio se terminó, volví a trabajar, y no me matriculé en el doctorado hasta 2005.
¿Por qué no seguiste estudiado inmediatamente después de la licenciatura, si te gusta estudiar y escribir?
La prioridad era independizarme, y también me planteaba la posibilidad de vivir de la escritura ensayística. Durante la década pasada el dinero institucional parecía circular con cierta fluidez, y los proyectos de arte digital también recibían presupuesto, aunque me parece que la escritura siempre ha estado en un limbo extraño (no es "arte", no requiere "ayuda a la producción", pero sí "estar haciendo solo eso durante un tiempo", y tiende a ser investigación de base, no aplicada).
Traduzco profesionalmente desde el último curso de la licenciatura, de manera que la traducción ha resultado una profesión mucho más viable que el "escribir algo a ver si...", y también he conseguido vincularla a mis conocimientos académicos traduciendo las revistas Artnodes (UOC) e Hipertext(UPF).
Pero al final decidiste apuntarte al doctorado de Comunicación. ¿Por qué?
Me pareció que tendría más posibilidades profesionales si cursaba un doctorado. El régimen académico pre-Boloña era más flexible que el sistema actual, y pude cursar los dos años de doctorado y preparar la tesina durante los dos años siguientes mientras trabajaba. Si no hubiera podido trabajar, no habría podido seguir estudiando. Esta situación es muy inusual dentro de los doctorandos, por lo que es necesario explicarla para explicar por qué tardé y he tardado lo que he tardado, y señalar así cómo se articula mi relación con lo académico.
¿Mantuviste el intéres por la narrativa?
Totalmente. Aunque hubo un cambio muy importante que he repetido hasta la saciedad: me empecé a encontrar con muchas obras que no eran interactivas en el sentido de hacer clic y que pasaran cosas o que incluso pudieras modificarlas. Empecé a dar menos importancia a lo interactivo, y más a lo digital como lenguaje multimedia (texto, foto, vídeo y sonido combinados)
Además, empecé a interesarme por los orígenes de la creación narrativa digital. Para el trabajo final de la asignatura de doctorado "El mitjà interactiu" me basé en un blog planteado en fragmentos del comisario y crítico José Luis Brea (La crítica en la era del capitalismo cultural electrónico); el blog de Brea se basaba en pensamientos breves como los que podían articular autores como Walter Benjamin. Asimismo, me inspiré en la obra Diary of a stardel artista digital Eduardo Navas, que contextualizaba los diarios de Andy Warhol y a quien conocí cuando viajé a a la Bienal Interactiva de Mérida (México) a presentar Tempus Fugit (2005).
Considerando estos precedentes, tomé unas entradas que había escrito en mi blog sobre los orígenes de la narrativa digital y que aludían a aspectos específicos (vídeo, texto, espacio y tiempo), y las amplié a través de un segundo blog denominado Filiaciones narrativas.
Aproveché este proyecto doctoral para dar una conferencia en el Espacio Fundación Teléfonica de Buenos Aires que llevó por títuloNarrativas 2.0., donde vinculé esos cuatro orígenes de la narrativa digital a obras narrativas vinculadas a la web 2.0., para entonces de plena actualidad. Posteriormente, la revista Cybertronic de la Universidad Tres de Febrero me pidió un artículo con este mismo enfoque, "Genealogía de la narrativa creada por medios digitales" (2008), donde ahondé en obras y artistas analógicos que podían conectarse con la narrativa digital. Y amplié nuevamente este enfoque para la comunicación del IV Congreso de la CiberSociedad "De la narrativa analógica a la digital" (2009)
Por extraño que parezca al añadir ahora tantos enlaces, por aquel entonces aún no sabía que la idea de "filiaciones narrativas" iba a ser el germen de mi tesis doctoral.
Entonces, al terminar los cursos de doctorado, redactaste una tesina titulada Narrativa multimedia, narrativa intransitiva. Investigación interdisciplinar sobre la narrativa digital como narrativa audiovisual no convencional. Vayamos por partes, ¿por qué "narrativa multimedia, narrativa intransitiva"?
Estaba intentando afianzar un concepto que no fuera "relato interactivo" por los problemas que me planteaban todas aquellas obras digitales interesantes que no eran interactivas. A comienzos de 2005 había coordinado junto a Antoni Mercader el V Congreso de Arte y Multimedia: Metanarratives, donde elegimos a ponentes dedicados a las "metanarrativas" según el término que acuñó Mercader (nada que ver con las metanarrativas de Jean-François Lyotard, Mercader pensó unas narrativas "más allá de la narrativa", por así decirlo). Debido a esta colaboración, durante un tiempo me asociaron con el término "metanarrativas", que me parece interesante, pero no es mío.
Para cuando empecé a preparar la tesina, necesitaba un concepto propio. "Narrativa digital" habría sido la opción más lógica para encabezar el título, pero por algún motivo dudé y quedó como subtítulo, de manera que "narrativa multimedia, narrativa intransitiva" son conceptos más descriptivos de lo que desearía para un título. No obstante, hace muy poco di con esta entrevista al escritor Juan José Millás, donde amplía magníficamente lo que tenía en mente con lo de "narrativa intransitiva":
Sales a caminar al campo y es evidente que la tierra es plana. La lucha del ser humano contra su percepción ha sido brutal. Y uno de esos errores de percepción es la idea de que somos los dueños del lenguaje. Cuando un niño aprende a hablar decimos que va conquistando el lenguaje, y es justo al revés: el lenguaje lo va colonizando. Es un colono cruel porque en cuanto se mete en tu cabeza empiezan a aparecer los lugares comunes. ¿Y qué hace un escritor con semejante hallazgo? Pactar con ese colono. No hay que enfrentarse a él totalmente porque terminas volviéndote loco y escribiendo el Finnegans Wake, que es intransitivo. Un escritor debe moverse entre lo previsible y lo intransitivo".El subtítulo aporta además otros conceptos como "investigación interdisciplinar" (que sigo suscribiendo),"narrativa audiovisual" (que añadí porque mi director Jordi Alberich consideró que así no "desparramaba" hacia lo literario u otros campos) y "no convencional", que utilicé como sinónimo de "experimental", "no lineal", etc (pero que no ha cobrado idéntico protagonismo en la tesis).
De acuerdo, un título muy largo y complicado para la tesina. ¿Qué tiene dentro?
Narrativa multimedia tiene muchísimo de Estado de la Cuestión muy general. Es decir, que paso muchas páginas no solo justificando la idoneidad de investigar narrativas, sino también de hacerlo en el contexto de investigación de arte y cultura digital en general. Mi obsesión, que dura hasta el presente, es que hay muy poca investigación sobre narrativa dentro del arte digital, al margen de la investigación sobre videojuegos o la investigación transmedia, ambas, a su manera respectiva, muy especializadas.
En cualquier caso, lo más importante de Narrativa multimedia es que define el objeto de estudio de la narrativa digital, y plantea un guión y unas preguntas de investigación que he aprovechado (con las modificaciones pertinentes) hasta la actualidad.
Entonces hay una definición útil de narrativa digital en Narrativa multimedia. ¡Aleluya! Oigamosla.
Dije "conjunto de obras narrativas multimedia, accesibles en línea, que como tales participan mayoritariamente de los rasgos constitutivos del medio informático" (pág. 63). Dedico las primeras páginas de mi tesis doctoral a pulir esta definición. Cuando presenté la tesina ya comenté esta definición de narrativa digital y su contexto en el blog, y añadí la presentación en imágenes de la tesina para acompañarla.
Asimismo, en Narrativa multimedia también aparece la primera definición operativa de "filiaciones narrativas" (pág. 66), que como he dicho ha acabado constituyendo el cogollo de la tesis.
¿Qué conclusiones sacaste al elaborar Narrativa multimedia?
Constaté que el objeto de estudio de la narrativa digital estaba indefinido a pesar de las múltiples aportaciones existentes a la investigación del arte y la cultura digital.
Percibí asimismo que, aunque existe mucha investigación audiovisual en términos de "estudios fílmicos" o incluso de "estudios sobre videoarte", parece haber varias escisiones. Por un lado, entre arte contemporáneo y arte digital (lo que he tratado a menudo en las entradas de este blog etiquetadas como arte digital vs arte contemporáneo), pero tambié otra muy importante entre arte y narración. Como si la narración fuera por definición algo mainstream, convencional, "no artístico" en términos de "mundo del arte".
Sin embargo, todo lo que había podido investigar hasta la tesina arrojaba múltiples ejemplos de narrativa no lineal, no aristotélica, pasados y presentes. Me veía en la necesidad de conectar esos ejemplos para ver qué me enseñaban sobre lo que quería denominar "narrativa digital".
¿Qué hiciste al terminar Narrativa multimedia?
Seguir trabajando. Estaba preparando la tesina cuando empecé a trabajar también como docente en línea para la Universitat Oberta de Catalunya, muy especialmente en el ámbito de la comunicación digital. Escribí Narrativa multimedia en dos meses, pero mis periodos de preparación y reflexión, combinados con el trabajo, son extremadamente largos.
Próximamente comentaré otras lecturas, actividades y reflexiones que me condujeron a la elaboración del tercer volumen de esta Trilogía Narrativa, mi tesis doctoral tal y como está escrita.